lunes, 24 de mayo de 2010

El llamado de la Iglesia y las elecciones

Defender el derecho a interrumpir un embarazo cuando la salud de la mujer está en peligro no hace perder elecciones. De los 28 asambleístas en reelección que se enfrentaron al nefasto artículo 30, hoy 38 “la vida es inviolable desde el momento concepción…” 20 han sido beneficiados con el voto y hoy son diputados y diputadas por 6 años más.

Como representantes del pueblo, estos legisladores están a tono con el sentir de la población, según la encuesta Gallup-Hoy, el 80 por ciento de los encuestados afirma que una mujer puede interrumpir el embarazo cuando su vida está en peligro. El presidente de la Cámara de Diputados, Julio Cesar Valentín es hoy senador electo por Santiago y Gilberto Serulle (PRD), ex presidente de la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados, alcalde. Del Partido de la Liberación Dominicana Minou Tavárez (DN), Magda Rodríguez (Santiago), Juan Comprés (Duarte), Isabel de la Cruz (SD), Rubén Maldonado(SD), Alfredo Martínez(SD), Demóstenes Martínez(Santiago), Gilda Moronta(La Vega), Franklin Peña (SPM), Karen Ricardo (SD), Gustavo Sánchez(DN), Juana Vicente (SPM), Afif Rizek (Hermanas Mirabal), y Juan Comprés (Duarte). Diputados y diputadas que se atrevieron a desafiar la cúpula del Partido Revolucionario Dominicano (PRD) han sido reelectos: Ramón Bueno (SD), Pedro Aguirre (Puerto Plata), Salomón García (Ma. Trinidad Sánchez) y Josefa Castillo (SD).

Como decía mi padre: “la mala fe no pare hembra” A pesar de la campaña de la Iglesia, la mayoría de las y los opositores del articulo 30 fueron reelectos, mientras a los representantes de los grupos retrogradas se les negó el voto, entre ellos el Presidente de la Comisión del Código Penal, José Ricardo Taveras (FNP), Marino Mendoza (San Cristóbal), vocero del PRD a favor del Artículo 30, y Carlos Peña (PLD-DN) representante de la Iglesia Evangélica, todos ellos exiliados del Congreso. El representante de la Iglesia Católica, el diputado Pelegrín Castillo (FNP), tuvo reducción significativa de votos. En 2006 fue el diputado más votado en el Distrito Nacional I, después de su defensa basada en dogmas, en contra de la ciencia, pasó a “pugnar” con Alejandro Montás por un tercer lugar.

El miedo instaurado por la Iglesia penetró al Congreso, no obstante, las urnas fueron blindadas. El llamado de la Iglesia no tiene el efecto que la gente esperaba, ya no es como antes. La Iglesia ya no tiene interlocutores en la calle, su interlocutor es el poder. El llamado poder fáctico de la Iglesia hay que replantearlo, se ha estremecido en las urnas.